Diego Armando Maradona es sinónimo de la Selección Argentina. Pelusa será recordado por la eternidad por el Mundial 86, por dejar la vida cada que vistió la albiceleste, por cómo defendió los colores en Italia 90, por la injusticia del 94 y muchos momentos más. Pero todo tuvo un comienzo y el de Diego con la Mayor fue el febrero del 77.
¿Cuál fue el primer partido de Diego Maradona en la Selección Argentina?
En 1976, Diego Maradona debutó en la Primera de Argentinos Juniors con apenas 16 años y deslumbró a todos los amantes del fútbol. César Luis Menotti tomó nota y lo convocó para un amistoso ante Hungría a disputarse el 27 de febrero de 1977 en la cancha de Boca. Pelusa ingresó a los 20 minutos del segundo tiempo y la revista El Gráfico lo calificó con 7 puntos y destacó su tarea. Argentina ganó 5 a 1 con tres goles de Bertoni y dos de Luque.
¿Qué dijo El Gráfico del debut de Diego en la Selección?
“Muy buenos los cambios ordenados por César Luis Menotti. Primero, accediendo al pedido del público y haciendo ingresar al pibe Maradona. El partido estaba 5 a 0 y era el momento ideal para que un debutante absoluto ingresara con clima totalmente favorable, para hacerse a la idea de que es hombre dela selección, para vivir el cosquilleo de la celeste y blanca sobre el pecho sin sentirse abrumado por la responsabilidad. Segundo, haciendo salir a Luque, figura del equipo, autor de un gol histórico, para que se fuera bañado en una clamorosa ovación”, escribió Juvenal en la emblemática revista.
La injusticia del 78
César Luis Menotti puede ser considerado uno de los entrenadores más importantes de la historia de Argentina. Pero lo que hizo con Maradona en el Mundial 78 no se hace. Durante las convocatorias previas lo llamó.
Cuando tuvo que dar la lista definitiva para disputar el Mundial organizado en nuestro país, decidió no citarlo a Diego en lo que siempre será recordada como una de las injusticias más importante del fútbol.
La gloria de Maradona en México 86
Pasaron ocho años para que Diego tenga su merecido Mundial. Carlos Salvador Bilardo decidió que Diego sea el capitán del equipo en México y Pelusa no falló.
Fue la gran figura y el líder del grupo que se coronó campeón del mundo en el Estadio Azteca tras vencer a Alemania por 3 a 2 en una final para el infarto.